¿Has pensado cómo sería tu vida si te faltara, ya sea por cuestiones de nacimiento, alguna enfermedad o accidente, alguna extremidad (brazo o pierna)? Difícil, ¿no crees?
Pues ese es el caso de miles y miles de personas que sufren alguna discapacidad. Ese es sólo un ejemplo, pero se pueden contar por decenas. Desde este caso (falta de alguna extremidad) hasta la atrofia de alguno de los sentidos, alguna enfermedad neurogenerativa y más. Las personas con discapacidad (o con capacidades diferentes) tienen el derecho a llevar una vida normal, adaptándola a sus condiciones.
De acuerdo al Gobierno Federal de México (y no es un secreto), las personas con discapacidad pueden llegar a ser altamente productivas y dejar de ser una carga económica para sus familiares. De esta manera, la economía y el nivel de vida tanto de ellos como de sus familias crecen.
Según el Gobierno Federal, algunas de las ventajas que se obtienen al contratar personal con alguna discapacidad son las siguientes:
- Estas personas rara vez faltan a su trabajo y, en general, son más puntuales que el personal sin discapacidad.
- El hecho de que una persona con discapacidad conviva con otras personas dentro del área de trabajo, crea un ambiente de motivación mutuo. Esto eleva la productividad de tu empresa.
- A sabiendas de que para ellos, por su condición, es más complicado conseguir trabajo, lo cuidan más que otras personas.
¿Te parece poco? Pues existe una política que otorga beneficios fiscales a las empresas que contratan en sus filas de trabajo a personal con alguna discapacidad así que ¡no lo pienses más! Todos y todas tenemos derecho a competir en el mercado laboral y hacer de nuestra vida algo productivo por nuestro bien y el de nuestras familias.
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